Roberto Carlos Méndez (40), seis veces reincidente, fue condenado a ocho meses de prisión efectiva por resultar autor material y penalmente responsable del delito de hurto calificado por escalamiento en grado de tentativa.
El acusado fue sorprendido en horas de la madrugada dentro de un local comercial adonde ingresó luego de forzar una chapa del techo. Se trataba del galpón de una concesionaria de automóviles ubicada en calle Urquiza al 2000. Méndez fue descubierto gracias al oído atento de un vecino que escuchó ruidos extraños dentro del galpón, en un horario inusual, y llamó al dueño para avisarle.
Cuando el propietario de la concesionaria arribó al lugar, ya se encontraba en el lugar un efectivo policial. El damnificado abrió la puerta y no tardaron mucho en descubrir a Méndez, escondido debajo de uno de los autos ofrecidos para la venta.
El juicio abreviado contra Roberto Carlos Méndez se llevó a cabo en la Sala III del Tribunal de Juicio y estuvo a cargo de la jueza María Gabriela González.
El imputado fue declarado reincidente por sexta vez y se ordenó su traslado a la Unidad Carcelaria 1.