El médico Ricardo León detalló cómo se está acondicionando el Papa Francisco.
Parte de la terapia intensiva del hospital Papa Francisco que funcionará como centro de salud de referencia para el tratamiento de personas con coronavirus. Javier Corbalán
Desde la próxima semana, el hospital Papa Francisco y la Escuela N§ 4.811 Crucero Ara General Belgrano 2 de Mayo, ubicados en el barrio Solidaridad, se van a convertir en un centro de salud de referencia para el tratamiento de los casos de enfermos por coronavirus que se contagien en la provincia.
En el hospital se está armando un equipo de contingencia con tecnología de terapia intensiva en todas sus habitaciones. En estos momentos, el Papa Francisco se encuentra vacío ya que las autoridades sanitarias lo están poniendo a punto para trabajar con aquellos pacientes del sistema público que requieran asistencia por estar afectados por el coronavirus.
"El Papa Francisco era un hospital polivalente tanto de adultos, niños y de mujeres embarazadas y ahora pasaría a ser solo para pacientes que requieran camas de terapia intensiva", indicó Ricardo León de la Fuente, jefe de terapia intensiva del nosocomio.
Además, el especialista expresó que están trabajando en conjunto con el Ejército Nacional para montar carpas que funcionarán como consultorios dentro del predio que se encuentra en la parte posterior al Papa Francisco. También aclaró que ese lugar servirá como interconexión entre el hospital y la escuela para trasladar a los pacientes que no requieran cuidados intensivos.
En la institución educativa se han armado módulos de 50 camas para pacientes que no requieran asistencia crítica, pero sí oxigenoterapia. "Para eso ya se montó el trazado de oxígeno para poder estar operativos pronto. Esto es parte del esfuerzo del sistema público de salud de la provincia", expresó Ricardo León de la Fuente.
Explicó el Papa Francisco y la Escuela N§ 4.811 están pensados para contener la demanda del sistema público de la zona, y aclaró que cada institución privada deberá atender a sus pacientes cuando así lo requieran, porque por protocolo, ante un caso sospechoso no tienen que estar trasladando y derivando pacientes. "Nosotros nos ofrecemos para capacitar a las distintas instituciones privadas sobre cómo tratar o manejar este tipo de patologías", agregó.
"Acá en el hospital van a quedar los casos más críticos y aquellos, que son la mayoría, los que no requieren asistencia respiratoria y control de terapia intensiva serán tratados en las camas de menos complejidad, que se encuentran en la escuela", afirmó Ricardo León de la Fuente.
El hospital estaba pensado para una complejidad media, con una terapia intensiva con solo siete respiradores. Desde el Ministerio de Salud se realizó una compra grande de respiradores para elevar la capacidad a 90 camas con respiradores.
"Según el número y pensando en la contingencia, sería más o menos lo que necesitaríamos para la parte pública de esta zona", expresó el jefe de la guardia del hospital Papa Francisco.
En el nosocomio, van a recibir a pacientes en coordinados con el 911 y también a los que concurran de manera espontánea, que van a ser recibidos en la entrada principal del hospital.
"Tenemos una sala de espera muy amplia, en la cual podemos distanciar a los pacientes que necesitan estar ahí. Les rogamos concurrir solos, porque no pueden entrar con los familiares. Una vez que se internan, los pacientes quedan aislados. Los distintos consultorios están habilitados para que los profesionales realicen las consultas con el paciente que podría tener la enfermedad ", comentó.
Las acciones a implementar se fueron desarrollando a partir de la información que tienen los profesionales sobre cómo se comportó el virus en los otros países donde ya se desarrolló la enfermedad.
"Tenemos el diario del lunes, estamos viendo cómo se comporta y se va desarrollando la enfermedad y podemos tomar las medidas pertinentes. Por eso todo lo que se dice del aislamiento social es fundamental, porque el virus no vuela. Se transmite en el contacto estrecho, por eso tenemos que ser conscientes y tratar de poner en práctica todas estas medidas de público conocimiento", destacó.
El profesional pidió que los ciudadanos tomen conciencia y entiendan que en estos momentos deben estar aislados y en cuarentena para evitar la propagación del virus.
"Hasta ahora, no tenemos circulación interna del virus con lo cual nos da una ventaja epidemiológica muy importante que debemos aprovechar. Aislarnos y no entrar en contacto con gente nos va a ayudar a que esta pandemia no se expanda de una forma descontrolada, lo que hace que colapsen los sistemas de salud. Si nosotros podemos controlar la forma en que esta pandemia evoluciona vamos a protegernos", afirmó.
Ricardo León de la Fuente expresó que "están aprendiendo de los países de Europa, sobre todo Italia", en donde mucha gente grande se enfermó de golpe y no fueron suficientes los respiradores, los recursos médicos ni sanitarios para atender a toda una población que demanda asistencia crítica en el mismo momento.
"Eso hace colapsar el sistema de salud y la consecuencia son las enormes cantidades de muertos", remarcó el profesional.
Con respecto a los reactivos para hacer los análisis, el especialista expresó que los habían pedido, pero que recién la semana pasada llegaron al país los que Nación había solicitado en enero. "Nación está capacitando a la gente de distintas provincias para ir incorporando el testeo rápido en las mismas localidades y no tener que enviar las muestras al Malbrán. Salta también se capacitó, pero iban a priorizar en esta primera etapa a las localidades que tengan más casos", finalizó.