A través de sus redes sociales, Roger Federer confirmó las señales de alarma y anunció una noticia pésima para sus miles de seguidores y para el tenis en general: por la demora en la rehabilitación de su rodilla derecha, no jugará hasta la temporada 2021.
En un comunicado dirigido a sus fanáticos, el ex número 1 del mundo explicó las razones de su ausencia.
"Queridos fans, Espero que estén sanos y a salvo. Hace unas semanas, luego de experimentar un retroceso durante mi rehabilitación inicial, tuve que someterme a un procedimiento adicional de artroscopía en mi rodilla derecha. Ahora, tal como lo hice en la temporada 2017, he decidido tomarme el tiempo necesario para estar al ciento por ciento y volver en mi más alto nivel.
Voy a extrañar a mis seguidores y al circuito, pero voy a mirar hacia adelante y espero con ansias verlos de nuevo en el comienzo de la gira 2021". Los rumores sobre los problemas en la rodilla derecha, y las complicaciones por rehabilitación a la cirugía a la que se sometió en febrero pasado, se habían disparado en los últimos días, pero pocos imaginaban el anuncio de una ausencia que será, acaso, la más prolongada de su carrera, con al menos once meses de inactividad hasta su vuelta.
"La recuperación de Roger no va tan bien como esperábamos", había expresado Severin Luthi, amigo y uno de los entrenadores de Federer, a la cadena de radiodifusión pública suiza, Schweizer Radio und Fernsehen (SRF).
Cómo sería el US Open
Autoridades de los distintos organismos del tenis profesional mantuvieron una reunión virtual con más de 400 jugadores y, si bien no hubo definiciones y los involucrados coincidieron en que la prioridad es proteger la salud en tiempos de una pandemia mundial, fue el Abierto de los Estados Unidos el que dio un paso adelante y formalizó una propuesta para tratar de conservar la competencia en 2020, todavía programada del 31 de agosto al 13 de septiembre.
Stacey Allaster, la jefa ejecutiva de la Asocia-ción de Tenis de los Estados Unidos (USTA) fue la voz cantante del Gran Slam neoyorquino. A continuación se transcriben algunos de los puntos presentados por el US Open que quedaron a consideración y que en los próximos días se confirmarán o rechazarán: El torneo deberá ser sin clasificación para el main draw.
Reducción del cuadro de dobles: 24 parejas en lugar de 64.
Una compensación económica para los jugadores que no pudieron disputar la qualy ni el cuadro principal de dobles (afectaría a unos 350 jugadores).
Aumento del premio económico en las dos primeras rondas del main draw.
Vuelos privados a Europa una vez que termine el US Open para que los jugadores sigan compitiendo en el Viejo Continente.