Boca está en la búsqueda de un delantero para reforzar la ofensiva de cara a la próxima temporada y poder conseguir finalmente la tan deseada Copa Libertadores, que le es esquiva desde 2007.
El vicepresidente Juan Román Riquelme, tiene en carpeta tres nombres. Uno es un sueño y los otros dos son más terrenales, aunque también de categoría. El gran sueño de Boca es Edinson Cavani. El año pasado, el uruguayo dijo que quería "colgarse del alambrado de La Bombonera como el Manteca Martínez". Su contrato con el París Saint Germain termina en junio de este año, aunque el atacante confesó que se plantea abandonar la práctica profesional.
El segundo nombre que surge es el de Jonathan Calleri. El delantero afirmó en enero de este año que quiere volver a jugar en Boca, algo que no había manifestado desde que abandonó el club en 2015. El Xeneize también tiene en carpeta a Guido Carrillo.
El atacante surgido de Estudiantes siempre manifestó que su intención era continuar en Europa, aunque con 28 años la idea de volver al país ya comienza a darle vueltas por la cabeza y a Boca también.