Tras semanas de tensión política que llegaron a su pico máximo este fin de semana cuando River decidió unilateralmente no jugar ante el temor por el coronavirus, todo parece empezar a reordenarse.
El Millonario participó ayer tanto de la Asamblea y de la reunión de Comité Ejecutivo de Superliga como de la posterior reunión entre la Primera y Claudio Tapia. Rodolfo D’Onofrio aceptó una de las vicepresidencias de AFA lo que marcó la vuelta de uno de los dos clubes más grandes a la casa madre del fútbol argentino.
Luego de la tensión del fin de semana, se retomó el diálogo. Entre el domingo por la tarde y el martes, el presidente de River tuvo diversos contactos con AFA y Superliga. Mantuvo conversaciones telefónicas con el entorno de Claudio Tapia y el lunes por la tarde tomó un café mano a mano con Marcelo Tinelli. En esos contactos, D’Onofrio explicó la decisión sobre no presentarse a jugar ante Atlético Tucumán. Si bien las posturas fueron diferentes, ya que muchos clubes entiende que River se cortó solo en lugar de convocar a todo el fútbol, se acordó dejar atrás ese episodio y mirar para adelante.
En el encuentro de la semana pasada entre Tapia y D'Onofrio, el presidente de AFA le ofreció al de Núñez una vocalía. D'Onofrio la rechazó y dijo que una "institución tan importante" merecía una vicepresidencia. En la mesa chica riverplatense, hasta el viernes pasado, había muchas dudas sobre si aceptar o no el cargo. Las charlas del lunes y martes con las máximas autoridades de AFA y SAF fueron clave para inclinar la balanza. Y así ayer, River volvió a la AFA.
La banca del Pipa
El ex delantero de Boca Juniors, Darío Benedetto bancó a pleno a River por haberse plantado en la decisión de no jugar pese a la presión de la Superliga. "Felicito a River por la postura que tomó. Lo mismo que hicieron ellos lo tendrían que haber hecho todos los clubes del fútbol argentino y no jugar ningún partido así sea a puertas cerradas", dijo