Un joven de 26 años fue detenido luego de ser acusado como autor de los delitos de lesiones agravadas por la relación de pareja preexistente y por constituir violencia de género, desobediencia judicial y privación ilegítima de la libertad.
Fue denunciado en dos oportunidades por su expareja, con quien tienen tres hijos en común. En cuanto a la primera denuncia, contó que ese día llegó a su domicilio alcoholizado, pero como no le abrió la puerta, ingresó por la del fondo y comenzó a agredirla. Su vecina, que escuchó los gritos llamó a la madre de la víctima, y cuando ella llegó el acusado optó por retirarse del domicilio. Agregó que en esa oportunidad no se hizo revisar por el médico legal ya que no tenía con quien dejar a sus hijos.
En relación a la última denuncia, la mujer dijo que se lo cruzó cuando salía de una fiesta, y en ese momento la agarró del brazo y la llevó hasta su casa. Al llegar al lugar la golpeó y le quebró la mandíbula. Dijo que logró escaparse, pero él la volvió a agarrar y la llevó nuevamente a su casa. La tía del acusado, que se encontraba en el lugar vio la situación y llamó a la madre de la víctima, que al llegar al lugar logró que la deje ir. Agregó que esta vez sí se hizo revisar por el médico.
Luego de estas situaciones, la mujer se fue a vivir al domicilio materno, ya que allí el acusado no la molesta, por cuanto está protegida por toda su familia.
La jueza de Garantías 8, Claudia Puertas, dictó la prisión preventiva del hombre que seguirá detenido en la Alcaidía General.
Dijo en su resolución que en el caso existe un mayor riesgo a la integridad física y psíquica de la víctima, razón por la cual, y a fin de preservar su integridad física, asegurar los medios de prueba y que se cumpla con el proceso penal, la prisión preventiva dispuesta resulta ajustada a derecho.
Agregó también que el hecho denunciado constituye un gravísimo supuesto de violencia de género, la que fue especialmente tratada en la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia Contra la Mujer, más conocida como Convención de Belem Do Pará.