En la previa del viaje de Boca a Brasil para jugar ante Inter de Porto Alegre por los octavos de final de la Copa Libertadores, Miguel Ángel Russo le puso un corte definitivo a una cuestión que viene dando vueltas desde hace algunas semanas: la situación de Pol Fernández.
Consultado sobre si tiene pensado utilizar al jugador, que no arregló los números de su contrato con el “Xeneize”, pero cuyo vínculo recién vence el 31 de diciembre, el entrenador fue tajante y le cerró las puertas a cualquier posibilidad de que el mediocampista vuelva a jugar en estos momentos.
"Son cuestiones personales. Pol no es jugador del club. Llegamos hasta esta situación y nada más. Tiene que ver con formas. Y la decisión está tomada y punto. Las negociaciones empiezan y se terminan", comentó.