El Millonario entrenó esta mañana en Ezeiza y Marcelo Gallardo siguió de cerca al colombiano, que trabajó a la par durante la primera parte de la práctica. De la Cruz se sumó más tarde por un motivo particular.
Apoco más de tres días para el choque con Tigre en Victoria, River calienta motores en el predio de Ezeiza con la vuelta de varios futbolistas importantes para Marcelo Gallardo, quien siguió de cerca la evolución de Miguel Borja, ausente en la práctica del martes por un cuadro gripal.
El delantero colombiano, autor de uno de los tres goles de la paliza a Central Córdoba del último domingo, abandonó el River Camp a primera hora de ayer por decisión del cuerpo técnico y médico, ya que no lo vieron bien y decidieron que hiciera reposo en su domicilio.
Afortunadamente, el Colibrí amaneció mucho mejor este miércoles y se movió sin problemas en la cancha bajo la atenta mirada del Muñeco, que va recuperando de a poco a sus mejores soldados, tal como ocurrió con Milton Casco y Matías Suárez, otros que superaron sus respectos síndromes gripales y se sumaron a los trabajos con el grupo en la última jornada.
Asimismo, el DT se frota las manos por tener en condiciones físicas a Paulo Díaz y a Héctor David Martínez con vistas al duelo del fin de semana en el Estadio José Dellagiovanna, aunque todo indica que seguirá la dupla central conformada por Emanuel Mammana y Javier Pinola que tanta seguridad le viene dando al Millonario.
Por otro lado, Nicolás De la Cruz se ausentó en la primera parte de la jornada matutina debido a que tuvo que llevar a cabo la Jura de Bandera: el volante uruguayo logró nacionalizarse argentino y ya no ocupa plaza de extranjero.