Todo cae; las hojas de los árboles, un ladrillo, un lápiz y nos parece obvio. Pero fue Isaac Newton, allá por el siglo XVII que, probablemente observando cómo caía un objeto, propuso por primera vez una explicación para el fenómeno de la caída de los cuerpos, la gravedad. La gravedad es esa fuerza de atracción que se ejerce entre todos los objetos, tanto los de la Tierra como los del Universo, y que explica incluso las formas que adoptan las galaxias. Todos los objetos tiran unos de otros de modo que sólo intervienen sus masas y sus distancias (no necesitan estar en contacto). Newton enunció la ley de gravitación universal según la cual todos los objetos materiales del Universo se atraen mutuamente mediante una fuerza a distancia llamada ¨Gravitatoria¨.
La masa, frecuentemente definida de modo incompleto, como la cantidad de materia contenida en un cuerpo, se relaciona con la fuerza que se ejerce sobre un cuerpo y la aceleración (cambio en la velocidad) que adquiere.
Peso y masa: la masa permanece, sin importar la cantidad de fuerza que se le imponga. Esto nos permite diferenciar la masa del peso, ya que el peso depende tanto de la cantidad de masa como de la gravedad. Esto significa que, aunque una persona pese menos en la Luna (ya que tiene menor gravedad que la Tierra), su masa continúa siendo la misma.