Un hombre de 41 años fue condenado a seis años, un mes y quince días de prisión efectiva por el delito de abuso sexual con acceso carnal.
La jueza Mónica Faber, vocal de la Sala V del Tribunal de Juicio, ordenó que el condenado sea alojado en la Unidad Carcelaria 1 y que se le extraiga muestra de ADN para su inscripción en el Banco de Datos Genéticos.
El imputado, M. A. F., fue denunciado por abusar de su excuñada. La víctima refirió que el 10 de marzo del año pasado llegó a su casa alrededor del mediodía, luego de asistir a una fiesta. Antes de entrar conversó con su excuñado (expareja de su hermana) en la vereda. M. A. F. se encontraba tomado cerveza con unos amigos, le ofrecieron un vaso y se quedó con ellos conversando un rato.
Alrededor de las 14 salió la madre de la damnificada, le avisó que ella se iba y le pidió que entrara. Eso hizo y se recostó para dormir, pero no cerró la puerta con pasador.
La madre de la víctima vio a su exyerno en la vereda y antes de irse le dijo “que le encargaba”, porque la joven quedaba sola. El imputado le contestó: “Vaya tranquila”.
Poco después la damnificada se despertó sobresaltada cuando M. A. F. la sujetaba para accederla en contra de su voluntad. El imputado aprovechó la situación de vulnerabilidad de la joven, quien se encontraba sola y durmiendo, para avasallar su integridad sexual.
Nota: Se omitió el nombre completo de las personas involucradas para preservar la identidad de la víctima y su derecho a la intimidad y confidencialidad.
