Gustavo Ismael Díaz (22) fue condenado en juicio abreviado a la pena de un mes de prisión efectiva por los delitos de hurto simple y robo simple en grado de tentativa.
El acusado fue condenado por dos hechos ocurridos en septiembre y octubre de este año. En primer término, Díaz fue denunciado por la sustracción de una bicicleta de la caja de una camioneta. El propietario contó que había dejado estacionado su vehículo en la playa del mercado Cofruthos y, al regresar, advirtió que le faltaba el rodado que había dejado en la caja, debajo de una lona. Pidió al personal de seguridad del mercado que revisaran las cámaras de seguridad y así lograron identificar al autor del hecho, quien todavía se encontraba en el predio. La bicicleta fue recuperada de un taller donde Díaz la había dejado, desarmada.
La otra denuncia fue radicada por un vecino de barrio Los Gremios. El damnificado refirió que se encontraba trabajando en la planta alta de su casa, realizando tareas de construcción, cuando escuchó ruidos en la parte inferior. Miró hacia abajo y alcanzó a ver al imputado cargando una mochila con ropa y herramientas que había sustraído del lugar. Lo siguió y logró darle alcance. Díaz fue demorado luego por personal policial.
El juicio tuvo lugar en la Sala III y estuvo a cargo del juez Pablo Farah, quien revocó la condicionalidad de una pena dictada anteriormente al imputado y unificó ambas condenas en el monto de dos años y un mes de prisión efectiva.
Se ordenó el alojamiento del acusado en cárcel penitenciaria local.