El procurador general de la provincia, Abel Cornejo, resolvió el cierre preventivo de las Fiscalías Penales 1, 2 y 3 y el Centro de Mediación del Distrito Judicial Orán, en virtud de haberse confirmado un caso con resultado positivo de COVID-19 en el edificio donde funcionan las dependencias. Se mantiene el trabajo remoto y una de las fiscalas realizará todos los actos procesales presenciales impostergables.
Es que al presentarse un caso con resultado positivo de COVID-19, corresponde disponer – con carácter de urgente-, medidas restrictivas preventivas en el ámbito de esas dependencias y en resguardo de la salud pública comprometida.
En consecuencia, la Resolución 1177, dispone con carácter preventivo que los y las magistrados/as, funcionarios/as y todo el personal de las Fiscalías Penales 1, 2 y 3 y el Centro de Mediación del Distrito Judicial Orán, cumplirán sus funciones desde sus hogares mediante la modalidad de trabajo remoto, hasta el 21 de marzo del corriente año.
En la misma Resolución, quedó establecido que la fiscal Penal Nº 1, Daniela Alda Murúa, realizará todos los actos procesales de carácter presencial que resulten impostergables para las dependencias.
Se recomendó a todos los agentes alcanzados por la medida preventiva de aislamiento, que permanezcan en sus domicilios a los fines de evitar la propagación de la enfermedad en el contexto de la pandemia por COVID-19, y que, ante cualquier síntoma la patología, deberán dar parte inmediatamente al Servicio Médico del Ministerio Público.