Pablo Andrés Rojas cometió los delitos de lesiones doblemente agravadas por mantener una relación de pareja con convivencia y por el género, en concurso real con el delito de lesiones. Por ello, deberá cumplir la pena de un año y ocho meses de prisión efectiva
Luego de condenarlo, el juez de la Sala II del Tribunal de Juicio de Metán, Ramón Haddad, ordenó la inmediata detención del hombre y lo declaró reincidente por segunda vez, atento a los antecedentes condenatorios que registra.
Rojas deberá iniciar un tratamiento psicológico en el hospital local a fin de que se le permita aprender y tomar nuevas herramientas para construir relaciones o lazos familiares donde haya una mayor consideración hacia los otros y con manejo de los impulsos cuando estos tienen sus orígenes en afectos, lo que será abordado con perspectiva de género. También para que lo ayude a superar la situación de adicción al consumo excesivo de bebidas alcohólicas o sustancias estupefacientes.
Una vez firme la sentencia se extraerá material genético del hombre por el Servicio de Biología Molecular del Departamento Técnico del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF) y su posterior inscripción en el Banco de Datos Genéticos.
Por su parte, el Servicio Médico Forense del Poder Judicial de esa circunscripción realizará un informe físico de la persona condenada, donde se constatarán las señas particulares que permitan una identificación integral. También se le tomarán fotos actualizadas de la persona del condenado, de frente y perfil, como así también la impresión de un juego de fichas dactilares.
Sucedió el 19 de enero del año pasado Rojas llegó a su domicilio en estado de ebriedad. Su pareja le reclamó porque le había sustraído el celular, razón por la cual comenzaron a discutir. En ese momento el hombre se puso violento y comenzó a tirar cosas y a pegarle.
Al ver lo que estaba sucediendo, se presentó la hermana de la víctima, que también resultó lesionada.