Alcides Gualberto Hernández (41) fue condenado en juicio abreviado a dos años y tres meses de prisión de ejecución condicional por resultar autor de los delitos de amenazas, amenazas con arma y lesiones leves agravadas por la relación de pareja preexistente y por mediar violencia de género, en concurso real.
El imputado fue denunciado por su expareja, por hechos ocurridos en noviembre del año pasado. La mujer refirió que Hernández la vio con un amigo en la vía pública. Ambos circulaban en una moto y el acusado les cruzó el auto y le advirtió que, cuando llegue a su casa, la iba a matar.
Atemorizada, la denunciante se dirigió al domicilio de su madre para que la acompañara hasta su domicilio. Cuando ambas estaban en el interior, arribó Hernández ofuscado, tomó un cuchillo tipo sierrita y se abalanzó sobre ella.
La madre de la damnificada se interpuso y el acusado solo logró lesionarla en el brazo y antebrazo derecho. Seguidamente se retiró del lugar.
Para mantener la pena condicional, Hernández deberá cumplir estrictamente durante tres años las reglas que le impuso la jueza Mónica Mukdsi, vocal de la Sala VI del Tribunal de Juicio: someterse a tratamiento psicológico previo informe de un profesional que acredite su necesidad y eficacia; abstenerse de usar estupefacientes y de abusar de bebidas alcohólicas; abstenerse de acercarse a la damnificada, a su domicilio, lugar de trabajo y sitios que ella frecuente; no ejercer actos de violencia física o psíquica en contra de la denunciante; prohibición de cometer nuevo delito, entre otras obligaciones.
La jueza también ordenó que se implante consigna policial fija en el domicilio de la víctima durante diez días y, cumplido ese plazo, consigna ambulatoria durante tres meses más.