Hoy se desarrolló una nueva audiencia de juicio contra el sacerdote Agustín Rosa Torino, acusado de abuso sexual gravemente ultrajante, entre los testigos estuvo el padre de una de las víctimas quien aseguró que su hijo vivió situaciones horrendas.
Tras la ronda de testimonios quedó claro que las acusaciones de abuso eran conocidas dentro de la congregación porque las víctimas lo comentaron y pidieron ayuda pero no fueron escuchados.
Un miembro de la comunidad aseguró no haber sido testigo de abusos pero se enteró por las víctimas. Durante su declaración afirmó haber sufrido maltratos y manipulaciones por parte de Rosa Torino y remarcó que los hermanos que abandonaban la congregación, lo hicieron escapando.
Relató que uno de los exnovicios víctima le contó que sufrió abusos por parte del acusado y que pensaba en suicidarse, por lo que le sugirió realizar denuncias canónicas. Luego, la víctima le dijo que también quería hacer una “denuncia de verdad” en la Justicia de Salta.
Sobre la exmonja víctima, recordó que le relató maltratos por parte del sacerdote acusado y que formaba parte de su círculo. La notaba siempre tensionada e indicó que la trataban de loca.
Otro de los testigos fue el padre de un exnovicio quien relató que se enteró de los abusos junto a su esposa cuando leyeron su diario íntimo olvidado durante un viaje. Además afirmó que en una oportunidad visitó a su hijo en Finca de la Cruz y lo notó raro. Le dijo que se quería ir de la congregación.
Indicó que su hijo ingresó a la congregación a los 14 años, por vocación, afirmó que lo volvieron loco, al igual que a los otros chicos. También sostuvo que el régimen impuesto por el acusado dentro de la congregación, fue peor que el nazismo.