El juez de la Sala II del Tribunal de Juicio de Metán, Sebastián Fucho, condenó a de Roque Gallo, de 62 años por ser autor del delito de abuso sexual simple, y le impuso la pena de seis meses de prisión de ejecución condicional.
El hombre tiene prohibido de maneras absoluta acercarse a la víctima, o ejercer en su contra cualquier tipo de violencia. Tampoco podrá comunicarse con ella por cualquier medio.
En caso de incumplir alguna de estas reglas de conducta podría dejarse sin efecto la modalidad condicional de cumplimiento de la condena, que sería efectiva.
Una vez firme la sentencia se extraerá material genético del condenado por parte del Servicio de Biología Molecular del Departamento Técnico del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF), y su posterior inscripción en el Banco de Dato Genéticos, previa asignación del Dato Único de Identificación Genética (DUIG).
En ese mismo sentido, el Servicio Médico del Poder Judicial de ese Distrito realizará un informe físico de Gallo donde constatarán las señas particulares que permitan una identificación integral.
El 1 de mayo de 2019, la víctima, una joven de 17 años, fue a limpiar en la casa de Gallo, como ya había hecho en otras oportunidades. En el lugar, el hombre comenzó a besarla, mientras le decía que quería que ella sea su novia, a lo que ella se negaba constantemente. A pesar de ello, él continuaba besándola. Luego preparó un asado y la obligó a almorzar en su casa mientras le pedía que no le cuente a su madre lo sucedido.
Al salir del lugar, la menor contó a su progenitora lo que había pasado en la casa de Gallo, por lo que la mujer llamó a la policía y radicó la denuncia.