Saúl Marcelino Guzmán (29) fue condenado por dos robos cometidos en un local comercial y en la vía pública.
El primer hecho fue denunciado por el propietario del negocio adonde el imputado ingresó junto a otro sujeto tras violentar una puerta. El damnificado escuchó ruidos, salió a ver y alcanzó a divisar el momento en que Guzmán huía junto a otro sujeto, llevándose una bicicleta de su propiedad.
En el segundo hecho, la víctima fue un remisero. El denunciante refirió que dos hombres abordaron el vehículo en barrio El Cambio y le pidieron que los trasladara hasta barrio Santa Rita. Cuando pasaban frente a un aserradero, los pasajeros abrieron las puertas y se le abalanzaron tres sujetos que estaban ocultos en medio de la maleza. Uno de ellos lo golpeó en la cara y entre todos le sustrajeron el estéreo, la billetera, un pendrive y las llaves.
El damnificado recurrió a la policía y lo llevaron a hacer una recorrida por la zona. Fue entonces que logró identificar a Guzmán, que era quien lo había golpeado.
La jueza Carolina Sanguedolce, vocal de la Sala III del Tribunal de Juicio, condeno a Guzmán en un procedimiento abreviado a la pena de nueve meses de prisión condicional por resultar autor material y penalmente responsable del delito de robo simple.
La pena fue unificada con una condena anterior dictada contra el imputado en el monto de un año y nueve meses de prisión condicional, que fue tenido por cumplido.