Competía en una travesía a mar abierto cuando se le perdió el rastro. Sumaron un helicóptero y equipos infrarrojos para hallarlo.
Las horas pasan y la desesperación aumenta. Ezequiel Bermejo, el nadador desaparecido mientras competía en aguas abiertas en Necochea, sigue sin aparecer y Prefectura reforzó el operativo de búsqueda.
Así, junto a otros organismos de rescate, sigue con el rastrillaje desde el aire y el agua para hallar al nadador de 43 años que desapareció en la mañana del sábado mientras participaba en una competencia de aguas abiertas en Necochea.
El operativo para tratar de localizar a Ezequiel Bermejo, deportista de Temperley, se extendió durante la madrugada y se intensificó desde la salida del sol, con la intervención de bomberos, guardavidas, personal de la Cruz Roja Argentina, el SAME, y personal municipal y de Defensa Civil necochense.
Bermejo participaba este sábado por la mañana en la competencia Ríomar 2020, una prueba de 10 kilómetros de nado que une la desembocadura del Río Quequén Grande con la costa marítima de Necochea, pero no logró alcanzar la playa donde finalizaba el recorrido, por lo que se puso en marcha la búsqueda.
Fuentes de PNA informaron que el operativo continuó durante la noche con el Guardacostas Río Paraguay y el apoyo por tierra de la filial local de la Cruz Roja Argentina, y desde el amanecer retomaron la búsqueda el resto de las instituciones comunales y personal de las áreas de rescate y salvamento local, coordinadas desde un Centro de Operaciones de Emergencias que se conformó en la Secretaría de Turismo local.
Juan Carlos Cuenca, uno de los responsables de esta prueba, que cubre tres kilómetros por río y tres por mar, informó que "desde el sábado hasta este domingo no se ha parado un minuto" la búsqueda, y aseguró que la organización contrató una avioneta para reforzar el operativo por aire, en el que participaba además un helicóptero de PNA.
Señaló también que desde el sábado a la noche se utilizaron equipos infrarrojos de la Policía provincial "en la zona de la Escollera Sur", mientras que vehículos todo terreno continuaban los rastrillajes "por la orilla" del recorrido.
"No sabemos lo que pasó, nadie vio nada", dijo Cuenca, en diálogo con TN, y relató que la última persona que pudo ver al competidor fue un amigo que lo seguía desde el agua en un kayak, quien debió interrumpir el seguimiento a 1000 metros de la llegada porque sufrió la rotura del remo.
Además, subrayó que, según el testimonio del kayakista, Bermejo "venía hidratado, comido y programado, a buen ritmo" y que "lo vio bien y siguió nadando" durante el tramo de la travesía en el que pudo acompañarlo.
En cuanto a las condiciones en las que se puso en marcha la competencia, antes de las 9 del sábado, informó que "el día era cálido, con viento norte, una temperatura de 28 grados, el agua del río estaba cálida, y fue una salida espectacular".
Señaló además que los nadadores cuentan con "dos seguros, para el agua y en tierra", y que la organización dispuso además "embarcaciones de respaldo, con cinco semirrígidos -uno de ellos ambulancia acuática de Cruz Roja-, dos motos de agua, y guardavidas dentro y fuera del agua, y uno cada 200 metros en tierra", junto a camionetas dispuestas para traslados eventuales. Sin embargo, testigos de la carrera aseguraron que "no había semirrigidos" sino que hubo espectadores que usaron "un bote particular" para asistir a los deportistas.
Cuenca explicó por otra parte que el competidor desaparecido no utilizaba una de las boyas personales de nado que la organización de la carrera ofrecía como medida de seguridad opcional.
Dijo además que una vez reportada la desaparición, fue contactada la familia de Bermejo, que se desplazó hasta la localidad balnearia a la espera de novedades.