El británico Lewis Hamilton (Mercedes) abrió su lista de victorias en la retrasada temporada 2020 en el GP de Estiria, segunda cita del campeonato de Fórmula 1, a puertas cerradas en el Red Bull Ring en Spielberg, Austria.
El finlandés Valtteri Bottas (Mercedes), que conserva el liderazgo en el campeonato de pilotos, y el holandés Max Verstappen (Red Bull), lo acompañaron en el podio. Fue una largada perfecta para Lewis Hamilton, quien supo contener a Max Verstappen, a esta altura el único que se puede entrometer entre los Mercedes, mientras que Sainz intentaba superar por la parte externa al holandés, pero se quedó sin pista, y tuvo que levantar ligeramente.
La imagen del día seguramente será la mucho menos gloriosa de los dos Ferrari del alemán Sebastian Vettel y el monegasco Charles Leclerc eliminándose entre sí en el inicio. Leclerc tocó a Vettel y lo dejó afuera en la primera vuelta del gran premio. El monegasco intentó volver, pero finalmente abandonó en la quinta vuelta. Alex Albon y el sorprendente Lando Norris completaron el top cinco, por delante del mexicano Sergio Pérez, quien defendió el sexto puesto, tras arrancar 11 puestos más atrás. Lance Stroll, Daniel Ricciardo, Carlos Sainz y Danil Kvyat completaron los 10 primeros.
En la vuelta 66, Valtteri atacó a Max por la segunda posición, en lo que se convirtió en el mejor duelo de la carrera, con intercambios de posición y pelea rueda a rueda. Finalmente, el finlandés se impuso para terminar en la segunda posición y Max tercero.
El papelón de Ferrari
Tras una clasificación “que no estuvo a la al-tura de Ferrari”, según lo dicho por Mattia Binotto, el comienzo de la carrera en el GP de Estiria fue aún peor. Un Charles Leclerc excesivo en la Curva 3, intentó meterse en un hueco en el que no entraba, tocó a su compañero Sebastian Vettel, que se llevó la peor parte: perdió el alerón trasero y fue a boxes para un inevitable abandono. Leclerc: “Pido disculpas. Las excusas no son suficientes. Estoy de-cepcionado de mí mismo”, se lamentó.