Es la acumulación de líquido (sangre) entre el cráneo y el cerebro. Se estima que su incidencia es de 2 a 5 por cada 100.000 habitantes/año. La mayor parte de los enfermos tienen más de 60 años. Algo similar le ocurrió a Cristina Kirchner en 2013, aunque su cuadro fue crónico.
El cuadro clínico de Diego Armando Maradona cambió de un momento a otro. Cuando parecía que estaba todo preparado para una vuelta temprana a casa, incluso se estipulaba con verlo el domingo en cancha, el destino cambió las agujas del reloj. Los estudios que le hicieron al 10 -tomografía y resonancia magnética- arrojaron que tiene un hematoma subdural, algo similar a lo que le ocurrió a Cristina Fernández de Kirchner -su cuadro fue crónico- en 2013, y deberá ser operado de urgencia.
Bajo un fuerte operativo policial, Pelusa será trasladado con la camioneta que habitualmente lo lleva al Bosque para someterse a una cirugía hoy mismo. Estará bajo las manos de Leopoldo Luque, su médico personal, en la Clínica de Olivos, a partir de las 20. Su complicación es del lado izquierdo de la cabeza y ocurre con frecuencia tras un traumatismo, a veces casi imperceptibles, de cráneo. En la última imagen que dejó en La Plata, al 10 se lo vio con dificultades para caminar y hasta para hablar.
¿Qué es un hematoma subdural?
El hematoma subdural es la acumulación de líquido (sangre) entre el cráneo y el cerebro. Se los puede catalogar en tres estadios: agudos, si se dan entre los 3 días de provocado el trauma; subagudo, si se da entre los cuatro y 21 días y crónico cuando se diagnostica después de los 21 días. Se estima que su incidencia es de 2 a 5 por cada 100.000 habitantes/año. La mayor parte de los enfermos tienen más de 60 años.
Muchos enfermos tienen una historia de alcoholismo crónico, siendo otros factores predisponentes la epilepsia, enfermedades hematológicas, enfermos portadores de derivación ventrículo-peritoneal, consumo de medicación anticoagulante y enfermos con síndrome de hipotensión de líquido cefalorraquídeo.
Al Hematoma Subdural Crónico, en tanto, se lo considera como "el gran simulador", dado que puede presentarse bajo múltiples formas clínicas. Existe una forma de presentación más común en personas entre 50 y 60 años que es la cefalea, en ocasiones con peoría progresiva y refractaria a los tratamientos analgésicos convencionales, mas común por la mañana.
En pacientes de mas de 70 años, en los cuales los signos de atrofia cerebral pueden ser más acentuados, con una compílance cerebral mayor, y posibilidad de colecciones hemáticas extracraneales más voluminosas, los síntomas neurocognitivos son la forma más habitual de presentación, en ocasiones bajo la forma de un síndrome demencial, trastornos del comportamiento o trastornos del estado de animo.
Puede aparecer casi cualquier signo de disfunción cortical, incluida la hemiparesia (déficit motor contralateral) al hematoma, déficit sensitivo o las alteraciones del lenguaje, dependiendo del lugar de la corteza donde ejerce presión el hematoma.
Según los especialistas, este tipo de intervenciones son relativamente sencillas, pero todo depende de los antecedentes del paciente, sobre todo los cardiológicos por el tema de la anestesia. Los tiempos quirúrgicos dependen de muchos factores. Ahora, con el tema del coronavirus, los procedimientos duran un poco más, aproximadamente entre tres o cuatro horas. Generalmente, el paciente obtiene el alta médica a los 10 o 15 días, aunque lo deja apartado de sus actividades por un mes.