Nadia Podoroska habló sobre su gran campaña en el último Roland Garros y deseó que su éxito pueda multiplicar el desarrollo de las tenistas argentinas.
La rosarina Nadia Podoroska, a una semana de haber jugado las semifinales de Roland Garros, admitió que no se imaginaba lograr un resultado así en un torneo de Grand Slam al que ingresó desde la clasificación.
“Jamás me imaginé que llegaría a semifinales en Roland Garros. Me sentía bien, estaba con confianza, pero nunca hubiera creído en un torneo así”, expresó Podoroska desde Alicante, España, en una conferencia de prensa virtual organizada por la Asociación Argentina de Tenis (AAT).
La tenista argentina, que comenzó el Abierto parisino en el puesto 131 y desde el lunes está 48ª del ranking, manifestó: “Ojalá esto logre influir en el tenis femenino. No sé si me doy cuenta de que es histórico. Yo quiero hacer lo mejor posible. El cambio más importante sería el de sumar torneos en Sudamérica”.
Podoroska comentó que su logro en Roland Garros no fue producto de “hacer un click” en el torneo sino de “un proceso de trabajo de un año y medio con mi equipo. A principios de año me sentí jugando con más orden, con idea más clara de qué hacer en cada momento y lo pude trasladar en la cancha”.
Sobre sus dos semanas de disfrute en París, Podoroska afirmó: “Más allá de estar feliz de los resultados, lo que más me va a quedar en el corazón son esos mensajes de apoyo desde la Argentina, fue impresionante la cantidad de mensajes que me mandaron, videos de nenas jugando. Sentir que generás un contagio haciendo el deporte que amás, eso es único”.
Además, Nadia contó que su familia y su barrio, el de Fisherton de Rosario, “vivió cada partido con mucha alegría. Estuve en permanente contacto con ellos y fue muy lindo”, y que Mercedes Paz, capitana del equipo argentino Copa Billie Jean King (ex Copa Fed), también estuvo apoyándola en su día a día.
Podoroska consideró que, en tiempos de pandemia, resultó muy productiva la preparación en Alicante. “A veces el tenis no te da tanto tiempo y esta vez tuvimos dos meses de pretemporada para mejorar mi intensidad”.
La rosarina de 23 años, campeona panamericana en Lima 2019 y que representará al país en los Juegos Olímpicos de Tokio, insistió con que lo que más ayudaría al desarrollo del tenis femenino es la competencia. “Si las chicas pueden competir muchas semanas seguidas y que no sea tan difícil viajar, el circuito va a crecer y habrá más jugadoras. En mi carrera tuve muchas lesiones y momentos de incertidumbre, de no saber si podía seguir jugando, pero nunca pensé en dejar el tenis”, sostuvo.
El premio le brinda tranquilidad
Con respecto a la importancia del premio tras alcanzar las semifinales de un torneo grande, Podoroska aclaró: “La parte económica es importante, me da la tranquilidad para mantener a mi equipo, definir giras y estar más tranquila. Es un impulso a seguir. El logro del resultado me indica de lo que estoy preparada, de lo que puedo ser capaz”.
Durante su carrera como profesional la rosarina logró recaudar 301.547 dólares, pero su participación en Roland Garros le aseguró ganancias por 1.431.821,74 dólares luego de haber alcanzado las semifinales.
La tenista obtuvo 60.591,30 por los tres partidos disputados en la fase de clasificación y a eso le sumó 1.371.230,44 dólares por haber competido en el cuadro principal, donde llegó hasta semifinales.
Su futuro
Respecto del futuro, la rosarina adelantó que probablemente vuelva al circuito en el torneo de Linz, Austria, que se jugará entre el 9 y 15 de noviembre. “Mis objetivos siguen siendo los mismos para este año: seguir en este proceso, seguir agregando cosas a mi juego, seguir disfrutando, aprendiendo de este deporte, que es la única manera de crecer”, destacó.