El intendente de Maipú le contó a Olé cómo lo vio al capitán de Boca por la polémica foto del “picado” y por la situación personal que atraviesa por el coronavirus. Y dio detalles de su ingreso al pueblo...
Para él también fue un flash. De repente, ahí, en su despacho en la mismísima Municipalidad de Maipú, en ese lugar que frecuenta día a día en la tranquilidad del pueblo, estaba mano a mano con Carlos Tevez. "Para quienes somos de Boca, tenerlo a él sentado acá, fue algo increíble. Es mi ídolo", contó Matías Rappallini, el intendente de Maipú. Pero el capitán del equipo del que es hincha, claro, había ido por otra causa. Y su semblante demostraba malestar: "Estaba triste y enojado", aseguró el mandatario.
Tevez, en efecto, le pidió una audiencia al intendente de la localidad donde está pasando la cuarentena por esa foto que se filtró con un grupo de adultos y de chicos, quienes publicaron en sus redes sociales que habían jugado un picado con él. "Por esa razón le llegó una acta contravencional, por haber roto la cuarentena y por eso vino a aclarar la situación. Incluso habló con el comisario. Si bien acá estamos en fase 5, todavía están prohibidos los deportes de contacto", le contó el intendente de Maipú a Olé.
Según Rappallini, Tevez quiso aclararle principalmente lo del picado, ya que que el tema de las fotos es algo que le sucede a diario en el pueblo. "Si bien él está alejado del centro, hay gente que se acerca para pedirle fotos y él accede. Por esa razón estaba sin barbijo, porque estaba en su casa, que tiene mucho campo abierto. Saltaron el alambrado y se metieron. Y luego lo expusieron diciendo que habían jugado un picado con él. Pero Carlitos aseguró que eso nunca sucedió", dijo sobre los hechos que obligaron al ídolo a tener que salir a hablar por TV, en América.
Ahí, Carlitos contó que el coronavirus lo venía tocando de cerca, porque tuvo y tiene familiares en una situación delicada. "Tengo gente cercana que la pasa mal, como mi suegro y mi suegra, la verdad es que los pude sacar, pero estuvieron internados", dijo el Apache. Sin embargo, hay otros seres queridos que todavía están saliendo. Y en ese sentido, el intendente amplió: "Estaba enojado por la situación y triste por lo que está viviendo. De hecho, me explicó que por una situación personal no estaba de ánimo para jugar ningún picado", aseguró Rappallini.
En ese sentido. el intendente también contó que es la primera vez que Tevez los llama para manifestarles una preocupación en el pueblo. "Carlitos está tranquilo acá. Nunca había tenido problemas. Incluso, con el comisario nos pusimos a disposición siempre y nunca nos llamó. Si de hecho, para ingresar al pueblo, tuvo que pedir permiso, porque no puede hacerlo ya que él vive a unos 8km. Y cada vez Tevez entra, imaginate, es una revolución", describió la situación.
¿Cómo seguirá esta situación en particular? "Seguramente, la contravención se le va a levantar porque él ya dio sus explicaciones y se citará a las otras personas que estuvieron ahí para que expliquen lo sucedido", aseguró Rappallini. ¿Caso cerrado?