Fue además la cuarta conseguida de manera consecutiva por el equipo de Avellaneda, récord absoluto que se mantiene hasta el día de hoy.
La Copa Libertadores del año 1975 fue la decimosexta edición del torneo, la disputaron 21 equipos de 10 países diferentes. Por la Argentina se dio un caso curioso ya que Rosario Central y Newell´s fueron los dos equipos clasificados, a ellos se les sumó Independiente, último campeón, equipo que ingresó a la competencia para la fase de semifinales como era habitual en aquella época.
El desarrolla de esta etapa semifinal se ejecutaba mediante un triangular donde luego de dos primeras caídas frente a Central y Cruzeiro respectivamente en condición de visitante, el conjunto de Bochini y Bertoni logró dos victorias consecutivas en condición de local y consiguió su pasaje a la final del torneo gracias a la diferencia de goles obtenida. El rival sería la Unión Española de Chile, absoluta revelación del torneo.
El encuentro de ida de esta recordada final se jugó en el Estadio Nacional de Chile, el equipo local se impuso por 1-0 con gol de Sergio Ahumada. En la revancha disputada en el estadio de la Doble Visera, el equipo argentino obtuvo una resonante victoria por 3-1, el peruano Percy Rojas, Ricardo Pavoni y Daniel Bertoni marcaron para el equipo argentino mientras que Francisco Las Heras descontó para el equipo chileno. El triunfo de ambos equipos en condición de local obligó a postergar la definición de la Copa en un tercer partido en cancha neutral.
Para ese partido desempate jugado en el Estadio Defensores del Chaco de Paraguay, un 29 de junio como hoy, Pedro Dellacha, entrenador del Rojo, eligió a José Pérez, Eduardo Commisso, Miguel Ángel López, Francisco Sá, Ricardo Pavoni; Alejandro Semenewicz, Rubén Galván, Ricardo Bochini; Agustín Balbuena, Ricardo Moreno y Daniel Bertoni.
El conjunto de Avellaneda se impuso por 2-0 con goles de Ricardo Ruiz Moreno y Daniel Bertoni obteniendo así su sexto título en el torneo más importante y prestigioso de América a nivel clubes.
Esa misma noche, el Rey de Copas logró otra marca histórica que conserva hasta el día de hoy: es el único equipo que ganó la prestigiosa Copa en cuatro ediciones consecutivas, 1972, 1973,1974 y 1975. Tiempo después, de la mano de José Omar Pastoriza y con una generación fantástica de nuevos jugadores pero con la vigencia de Bochini, más precisamente en 1984. el Rojo ganaría su séptima Copa y sería hasta hoy, el equipo más ganador de América.