El futuro de Rossi parece estar lejos de Brandsen y en el Xeneize buscan a su reemplazante. Chiquito Romero pica en punta y no traerían un refuerzo en ese sector.
Boca arrancó el 2023 con incertidumbre por lo que sucederá en el arco de cara a futuro. Es que a Agustín Rossi le quedan seis meses de contrato y hay un interés de Flamengo por llevárselo ahora. Si se concreta, Hugo Ibarra perdería a una de sus principales figuras y deberá definir rápidamente a su reemplazante porque el Xeneize se jugará cosas importantes desde fines de enero con la disputa de la Supercopa Internacional ante Racing.
En 2022, el surgido de Chacarita se convirtió en una pieza fundamental del conjunto de La Ribera y se ganó el cariño de los hinchas que lo ovacionaron más de una vez. En la última Liga Profesional en la que el Xeneize se coronó, el futbolista de 27 años logró un total de 525 minutos sin recibir ningún tanto durante cuatro jornadas, a partir del superclásico con River. En ese torneo mantuvo la valla sin goles en 10 ocasiones y recibió 23 tantos.
Además, apareció en momentos claves: evitó la caída en un triunfo sobre la hora ante Defensa y Justicia en Varela, sostuvo al equipo en el clásico ante Racing, con el que peleó el título hasta la última fecha, y se lució ante Independiente en el duelo decisivo que le dio una nueva estrella a los de la Ribera. Por lo que si se va será una baja sensible para Ibarra. Pero en Boca no piensan ir a buscar un arquero.
El reemplazante estaría en el club desde hace tiempo. El que pica en punta para hacerse dueño del arco es Sergio Romero. El exfutbolista de la Selección Argentina llegó a Boca a mediados de 2022 pero no logró debutar porque debió someterse a una artroscopia en su rodilla derecha que lo marginó del resto de la temporada. Esa misma lesión lo había complicado en su paso por Venezia de Italia. Sin embargo, Chiquito comenzó la pretemporada a la par del grupo y está al 100 por ciento.
En tanto, las alternativas del subcampeón del mundo en 2014 están bien cubiertas con la experiencia y la proyección que aportan Javier García y Leandro Brey, respectivamente. El arquero de 35 años, quien en 2020 retornó a la institución en la que se formó, renovó contrato hasta diciembre de 2024, disputó 12 partidos durante el año cuando no estuvo Rossi o el técnico de turno optó por la rotación y respondió con creces. En más de una actuación fue figura.
Por su parte, el joven de 20 años que llegó proveniente de Los Andes viene de ser una de las grandes figuras de la Reserva de Mariano Herrón que se consagró campeona en 2022, con atajadas que rápidamente captaron la atención de los hinchas y ya tuvo su estreno oficial cuando ingresó en el complemento del partido ante Always Ready por la Copa Libertadores en reemplazo de Rossi.