De cara a un final para el infarto, el vicepresidente de Boca, Juan Román Riquelme, habló sobre cómo veía a los equipos grandes en la previa al Torneo de la Liga Profesional y aseguró que el Xeneize no era el candidato.
Román dijo que el favorito a ganar el campeonato era Racing, porque era el equipo de los denominados grandes que más descanso había tenido a mitad de año: "Creíamos que Racing era el favorito. Quedaron afuera ante Agropecuario (por Copa Argentina) y tienen más descanso. Estamos contentos de que estamos en la pelea".
Además de felicitar a Atlético Tucumán y Huracán por sus campañas, Riquelme expresó que Boca siempre tiene que estar en la lucha por el título: "Tenemos la obligación de competir en todos los torneos. Es lo que tratamos que los más chicos aprendan, los grandes ayudan muchísimo y nuestro escudo obliga a competir al máximo, en torneo argentino, Copa Argentina", expresó.
Por último afirmó que el plantel de Hugo Ibarra está preparado para el último partido: "El domingo tenemos una final. A los muchachos les gustan esos partidos. Llegamos con chances al domingo. Estamos agradecidos con los hinchas, la Bombonera es una fiesta, esperamos jugar bien y ganar".
River y el "Rojo" en una morbosa definición
Racing depende de Independiente para ser campeón, mientras que un triunfo de River en el Cilindro le dará el título a Boca.
La Academia miró desde afuera todo lo que pasó en La Plata. El empate que Leonardo Morales anotó de cabeza para Gimnasia a los 11 minutos de la segunda etapa le permitía retener la punta a la que había llegado el lunes tras vencer a Lanús, con una unidad de ventaja sobre Boca. Pero ahora, ya no depende de sí mismo: para ser campeón, el domingo deberá ganarle a River en Avellaneda y, en paralelo, aguardar que Independiente le dé una gran mano venciendo o empatándole a Boca en la Bombonera. Ambos partidos se jugarán a partir de las 17.
Si Boca perdiera y Racing empatara, habrá igualdad en 51 puntos y un desempate a jugarse el miércoles próximo en cancha neutral. El que quedó fuera de la discusión por el título fue Huracán, que con 47 puntos ya no podrá alcanzar a Boca ni siquiera venciendo a Patronato el mismo domingo en Paraná.
Será una definición para el morbo en la que un cruce de clásicos tenía deparado el destino para conocer al nuevo campeón del fútbol argentino.