El delantero de Independiente se refirió a lo que vivió cuando decidió continuar en el club.
El capitán de Independiente, Silvio Romero, aseguró que cambió ‘murmullos por aplausos’ en el último tiempo tras su decisión de quedarse y no irse en condición de libre por la deuda salarial.
“ Cambié murmullos por aplausos en el último tiempo. En el momento de las cartas documento yo venía de ser el goleador del torneo y había logrado el reconocimiento de la gente”, comentó el cordobés en una nota con ESPN.
Romero marcó 32 goles en 83 partidos desde su arribo al rojo en el 2019 pero después de la suspensión por la pandemia del coronavirus le costó desde lo físico y sufrió diferentes lesiones en el ciclo del ex DT Lucas Pusineri.
“Cuando llegué, si bien tuve algunos rendimientos buenos en Copa Libertadores, no era el rendimiento que se esperaba de míà y que yo también lo esperaba”, continuó.
Por otro lado, la dirigencia abonó los 360 mil dólares adeudados al español nacionalizado venezolano Fernando Amorebieta y dentro de dos días levantará la inhibición para incorporar jugadores, establecida por la FIFA y la AFA.