Si bien ya le realizaron un primer PCR con resultado negativo, las medidas continuarán hasta descartar cualquier posibilidad de contagio.
Una médica del Hospital San Bernardo fue aislada por un contacto estrecho con un caso positivo de COVID-19 que fue atendido en el Hospital Papa Francisco. Ante la posibilidad de que pueda haberse contagiado se tomó la decisión de activar el protocolo.
Según información a la que accedió InformateSalta, la médica ya se realizó un primer test de PCR que le dio negativo, sin embargo la medida continuará hasta que quede totalmente descartada esa posibilidad.
El paciente con el que habría mantenido el contacto estrecho estuvo internado en el Hospital Papa Francisco tras realizar un viaje donde repatrió a su madre y fue dado de alta con un PCR negativo tras varios días de internación.
Se pudo conocer que la persona volvió a manifestar síntomas y tras realizar un nuevo chequeo detectaron otra vez la enfermedad y eso activó las alertas en la médica que permanece en aislamiento.
