El coronavirus SARS-CoV-2 se transmite principalmente a través de gotitas respiratorias, y no está presente en los fluidos sexuales. De todos modos, el acto sexual implica una intimidad y cercanía que sí puede representar riesgo. Te contamos los recaudos que debemos tomar.
En la actualidad, debido a la pandemia que sacude el planeta, no se habla de otra cosa que del coronavirus. Las dudas sobre esta infección son cada vez mayores, ya que las fuentes de información son muchas y no todas están fundamentadas científicamente.
Lo cierto es que, al tratarse de un nuevo virus, aún hay muchas características que desconocemos. A día de hoy ya se están poniendo en marcha numerosas investigaciones y estudios para conocerlo mejor.
No obstante, sí que se conoce cómo se transmite el virus. Por ello, en este artículo te explicamos cuáles son los mecanismos de transmisión, haciendo hincapié en el riesgo que puede haber de transmisión sexual.
¿Qué es el coronavirus?
Los coronavirus son, en realidad, una familia de virus. SARS-COV-2 es el nombre con el que se ha denominado a esta nueva cepa que surgió en diciembre de 2019 en China. Es un virus que puede causar diferentes cuadros clínicos.
En primer lugar, hay que destacar que muchos infectados cursan de manera asintomática, especialmente los niños y los jóvenes. No obstante, también puede producir síntomas parecidos a un catarro o una gripe. Del mismo modo, este virus puede causar un fallo respiratorio, e incluso la muerte.
Las personas con más riesgo de sufrir complicaciones por la infección son las de edad avanzada y aquellas con un sistema inmune debilitado. Pero, como hemos mencionado, hay muchas personas asintomáticas, por lo que el riesgo de transmitir la infección sin saberlo es alto.
¿Cómo se transmite?
Los científicos han descubierto que el coronavirus se transmite a través de gotitas que proceden del aparato respiratorio de una persona infectada. Estas gotitas las expulsamos cuando tosemos, estornudamos, o incluso al hablar.
Por ello, se dice que el virus se propaga de persona a persona. La distancia de seguridad que se debe mantener entre unos y otros para evitar el contagio es de entre 1 y 2 metros, ya que el aerosol de gotitas se desintegra a mayor distancia, y no puede permanecer en el aire.
Por otra parte, parece que la infección por coronavirus se puede adquirir al entrar en contacto con objetos contaminados. De ahí la insistencia en realizar de manera frecuente una correcta higiene de manos.
¿Se puede transmitir el coronavirus sexualmente?
No hay ninguna prueba de que el coronavirus esté presente en las secreciones vaginales o en los fluidos masculinos de origen sexual. Por ello, técnicamente, el virus no se transmite sexualmente. No obstante, el sexo es un acto íntimo y cercano que implica muchos otros aspectos.
Por ejemplo, el beso. La mayoría de las personas se besan durante el acto sexual. Como hemos mencionado, el virus sí que se propaga a través de gotas respiratorias, por lo que este gesto supone un riesgo mayor.
Además, el contacto íntimo con cualquier persona supone un riesgo, porque realmente se desconoce si tiene o no la infección. En la actualidad, en la mayoría de los países se ha establecido un periodo de cuarentena. Se desaconseja visitar a otra persona, y mucho menos mantener relaciones íntimas con alguien que no está compartiendo la cuarentena bajo el mismo techo.
Distinto es el caso de dos personas que estén confinadas juntas. Para los convivientes no existe contraindicación de tener sexo durante la cuarentena. De hecho, si no hay síntomas ni antecedentes de exposición reciente, no hay ningún motivo para estar asustados.
Para recordar sobre sexualidad y coronavirus
El coronavirus no se transmite a través de los fluidos sexuales. Aún así, el acto sexual conlleva mucha cercanía que sí puede suponer un riesgo para el contagio. Si has permanecido confinado con alguien, y ambos estáis fuera de riesgo, no hay ninguna contraindicación.
Además, también debemos recordar que existen muchas otras prácticas sexuales que no implican el contacto o la penetración. Ya que se recomienda interactuar con otras personas solo para necesidades básicas, puedes explorar formas alternas.
Puedes tratar de mantener el erotismo mediante videollamadas, lecturas eróticas o con la masturbación. Lo importante es que trates de prevenir al máximo la infección y que no pongas en riesgo tu salud ni la de los demás.