Esperan que haya una mejora desde el lunes y que no afecte el abastecimiento.
El sector de los cítricos tuvo inconvenientes en varios municipios salteños para levantar la cosecha. Fotos gentileza Acnoa A pesar de ser una actividad esencial y estar exceptuada por el Gobierno nacional de las restricciones de circulación del aislamiento social obligatorio, el sector de la producción de alimentos sigue enfrentando complicaciones logísticas que ponen en riesgo la cosecha y, por tanto, el abastecimiento de algunos productos.
Las complicaciones, según los referentes del sector, surgen a partir de las medidas que toman los intendentes de algunos municipios, las cuales están al margen del decreto presidencial que establece los alcances y excepciones del aislamiento; o por la interpretación que las fuerzas de seguridad hacen sobre los alcances jurisdiccionales de las normativas provinciales y nacionales.
En cualquier caso, dirigentes de los distintos sectores, autoridades provinciales e incluso sindicales trabajan coordinadamente con productores y empresarios para resolver los “puntos grises” y homologar un protocolo que cumpla con las exigencias sanitarias para evitar la propagación del COVID-19 y, al mismo tiempo, garantizar la actividad productiva.
En Salta, los mayores inconvenientes se dieron en algunos municipios del norte, el sur y el este provincial, donde no se permitía la circulación de colectivos que debían trasladar cosecheros del sector citrícola, situación que ocasionó demoras en la cosecha que, de no resolverse en el corto plazo, podría causar también desabastecimiento, pérdida de calidad en las frutas frescas y que muchos trabajadores no puedan realizar su actividad, con el impacto económico que esta situación conllevaría.
Operativo de sanitización de un colectivo que traslada cosecheros del citrus.
El presidente de la Asociación Citrícola del Noroeste Argentino (Acnoa), Pablo Padilla, explicó a El Tribuno que “hubo algunos problemas porque no nos dejaban pasar por los pueblos”, pero destacó que “ahora nos están dejando circular paulatinamente y de a poco. Esperamos para el lunes poder tomar la normalidad necesaria para que esto funcione”.
“Nosotros somos una actividad exceptuada, hemos presentado como asociación en todas las provincias un protocolo desarrollado por profesionales y nos pusimos a disposición de las autoridades para contarles cómo íbamos a trabajar, pero los intendentes nos impedían el paso”, señaló Padilla.
El titular de la cámara empresaria que nuclea a los sectores especializados en la producción, industrialización y comercialización de cítricos de las provincias de Salta, Catamarca, Jujuy y Tucumán indicó: “Entendemos que hay una prioridad, que es la salud y la estamos respetando porque nos ajustamos a todos los protocolos; pero desde lo económico hay que entender también que esta es una actividad que tiene una capacidad de distribución de los ingresos importante”, y que “en estos momentos no es un dato menor, sobre todo para pueblos donde hay muchos trabajadores en esta actividad”.
Padilla dijo que “el problema es que se puede terminar de cosechar muy tarde, con lo cual toda la fruta iría para industria, con una utilización de la mitad de los cosecheros y se perdería además la etapa de empaque para fruta fresca que demanda otros 100 puestos de trabajo por empresa”.
Acopio de tabaco, con turno
El sector del tabaco, por su parte, consiguió unificar un protocolo sanitario para poder abrir el acopio, aunque con personal reducido y por turnos. Tras la primera semana de trabajo con esta modalidad, el balance de los resultados es satisfactorio.
El gerente de la Cooperativa del Tabaco, Germán Martos, indicó a este diario: “Hemos trabajado con el Ministerio de la Producción y los sindicatos y armamos un protocolo que nos aprobaron y, en el marco de ese protocolo, arrancamos las actividades el lunes (pasado)”.
“Nos fue muy bien, atendemos media jornada, desde las 7 hasta las 13, compramos el volumen que nos habíamos trazado como objetivo trabajando con los equipos mínimos indispensable y, a todo eso, le sumamos los operativos de sanitización, distanciamiento social, control de temperatura corporal en el ingreso, y entrega de alcohol y barbijos al personal”, destacó Martos.
Finalmente, reconoció la disposición del productor. “Nos dio una mano tremenda. Antes trabajábamos a puertas abiertas y ahora estamos con un sistema de turnos por zona”, dijo, y agregó: “De esta manera, a las 12.30 a más tardar, cerramos las puertas de la empresa y ya no queda nadie”.
Confusiones
Finalmente, el titular de la Sociedad Rural Salteña, Ignacio García del Río, evaluó: “Ciertamente hubo dificultades y sigue habiendo, probablemente por las confusiones que generan a veces las distintas normas a nivel nacional y provincial pero, en general, la circulación es buena”.
“Hay problemas en los controles porque a veces la Policía pide la autorización única de la Nación, mientras que a nivel provincial se sigue insistiendo con que la declaración jurada de circulación local es suficiente”, remarcó.