La palabra que más se repitió fue libertad, pero también hubo reclamos por la economía, el coronavirus y la inseguridad.
Sin una consigna unificada, pero con una bandera sola, la argentina, miles de personas se movilizaron este domingo en varias de las principales ciudades del país para expresar su descontento con la crisis económica, el aislamiento social prolongado y el intento de reforma judicial penal, como lo hicieron el 17 de agosto, aunque esta vez con una concurrencia sustancialmente menor.
Algunos con consignas políticas, otros con objetos contundentes para hacer ruido, los manifestantes se hicieron sentir el domingo por la tarde en el Obelisco de la Ciudad de Buenos Aires, en la Quinta Presidencial de Olivos, en Rosario, en San Miguel de Tucumán, en Córdoba capital, en Mendoza capital, en Bariloche y en otros puntos a lo largo y ancho del territorio nacional.
En caravana de autos o a pie en pequeños grupos, miles de porteños y hasta bonaerenses se reunieron alrededor del Obelisco, intentando mantener la distancia unos de otros por el coronavirus, donde la mayoría expresó su preocupación por el presente del país tanto como su incertidumbre por el futuro.
En el microcentro porteño, una mujer explicó ante TN que concurrió a la marcha “por la patria”: "Suceden cosas muy grave, solo se habla de un virus, pero hay argentinos que mueren por las balas de los delincuentes, ¿esos argentinos no valen?”.
Un hombre también criticó la gestión de la pandemia: "Vine para parar la impunidad de este Gobierno, que lo único que hizo fue poner una cuarentena, que no existe más, frente a la gente que se muere de hambre. Hay que gobernar para todos, no solamente para un grupo”.
En Tucumán, un chico de 18 años se animó a sumarse a la movilización: "Soy pibe, pero no tonto. Si Dios quiere, el día de mañana, me esforzaré mucho, me romperé la espalda estudiando, para que este gobierno no cuente con mis impuestos para mantener lo que ellos hacen”.
A su lado, una chica fue contundente: "Quiero decirle al Presidente: ‘Usted a mí no me representa’. Quiero que respeten a los que yo voté”.
Muy cerca de allí, dos amigas coincidieron. La primera dijo: "Vine a defender la República, la Constitución y la libertad de expresión. Nos están silenciando. Estamos hartos”. Y la segunda agregó: "El único sueño que tenemos es poder vivir en nuestro país, pero hasta eso nos están sacando. Me molesta la gente tibia. No puede ser que pase esto y solo salgamos los mismos de siempre. Tienen que salir todos”.
En la Ciudad de Córdoba se dio una situación particular. Según varios manifestantes, la fuerza de seguridad limitó el acceso al Patio Olmos, epicentro de la marcha. Dos señoras denunciaron: “Señor gobernador, abra las calles, no mande a la Policía, porque estamos en libertad”.
Un señor concluyó: "Estoy en todas las marchas porque quiero un país libre. Somos la gente que trabaja, que aporta, pero el Gobierno nos saca a nosotros para darles a gente que no trabaja.