La cuarentena obligatoria ya lleva 100 días en Argentina y se extenderá, al menos, por otros 20.
En este contexto Cadena 3 decidió consultar a tres especialistas de diferentes áreas para hacer un diagnóstico de las consecuencias y los resultados de esta medida.
Economía
Para Santiago Bulat, la situación es "muy compleja" y no tiene un "horizonte claro".
"Las empresas no saben qué decisiones tomar. Se podría tomar la decisión de inyectar dinero y recuperarlo después, pero como no se sabe hasta cuándo va a durar, esto se empeora más. Las empresas quieren cerrar, ir a juicio y que eventualmente se arreglen más adelante. Ante la incertidumbre, poner plata no es muy sensato", dijo.
Además, pronosticó que la economía "se seguirá destrozando" y que la caída del PBI podría superar el 10%.
"Seguro terminaremos con índices complicados a nivel social. Va a ser un año difícil y la prioridad va a ser que el sector privado se cuide. El sector público se financia del sector privado y la emisión monetaria es más grave que el no financiamiento. La economía está muy complicada y esperamos que termine lo antes posible para salir del embrollo el año que viene", agregó.
Para la infectóloga, Leda Buzzi, la cuarentena logró aplanar la curva epidemiológica de la pandemia y permitió "ganar tiempo" para fortalecer el sistema de salud.
"El personal de salud pudo capacitarse en la atención de estos pacientes y en la utilización de equipos. Esto evitó que miles de casos se produjeran juntos en poco tiempo y evitó miles de muertes", expresó.
También indicó que la cuarentena logró que el pico de la enfermedad se "corriera hacia adelante".
"Este pico hubiera podido ocasionar el colapso del sistema de salud, tremendo, triste y lamentable. La implementación de la cuarentena fue muy exitosa. El 85% del territorio logró controlar los focos. En AMBA y otros puntos, siguió su curso ascendente escalonado", expresó.
La especialista hizo referencia también a los números actuales: más de 50 mil casos, 1.100 muertos, una tasa de letalidad del 2% y una mortalidad de 25 casos cada millón de personas.
"A pesar que los datos en el concierto nacional son auspiciosos, vimos aumentar la ocupación de camas en un 30% en una semana. Con un nivel general que va del 50% al 54%, todo sucedió en el marco de una mayor movilidad", indicó.
Finalmente, se refirió a la vuelta de la cuarentena estricta y pidió solidaridad y empatía.
"Llegó la hora de cerrar y volver a la medida tan primitiva como efectiva. No nos enojemos con la cuarentena, sino con la pandemia que es una calamidad. Es lo que nos toca. Banquemos, no nos queda otra. Se va a terminar como otras pandemias. Solidaridad, empatía y ayuda", culminó.
Piscología
Ricardo Antonowicz, piscoanalista, comentó que la situación generó incertidumbre y estrés en la gente.
"Creo que en el inicio de la pandemia, entramos en un estado de incertidumbre, de temor y de pánico que, en el transcurso de este tiempo, hay gente que se fue tranquilizando y tomando recaudos. El estrés que produjo esta noticia de una pandemia fuera modificándose: hubo profesionales que fueron hablando y tranquilizando a la gente, pero bueno la manera que cada uno puede salir de determinada situación depende de variables complejas. No hay nada que pueda garantizar que la gente quede indemne de esto que sucedió", dijo.
El especialista indicó también que esta situación puede generar que afloren "recursos" para salir de la situación.
"Habría que alentar a que la población pueda sacar lo mejor de cada uno y que pueda inventar cosas para estar mejor. No se acaba el mundo. Quizás para algunos empiece el mundo o puedan verlo de otra manera en este momento. Para algunos es una oportunidad y para otros un castigo", expresó.