Desde antes de las 19, cientos de personas se concentraron frente a los tribunales porteños para participar de la manifestación en reclamo de Justicia por el crimen de Lucas González.
Familiares y amigos de Lucas González, acompañados por miles de personas que portaban banderas argentinas, participaron esta tarde de una manifestación en reclamo de Justicia, donde la madre del adolescente aseguró que su hijo llevaba como única arma "los botines rotos" y reclamó "la prisión perpetua para los tres" policías que participaron del hecho porque "tiraron a matar".
Frente a los Tribunales porteños, donde se levantó un escenario en la puerta principal sobre las escalinatas de ingreso, los padres de Lucas fueron los principales oradores de la manifestación y exigieron "Justicia" por su hijo, reclamaron que los tres policías detenidos por el hecho sean "condenados a prisión perpetua" y pidieron que "no existan más" casos "como el de Lucas".
Con remeras blancas con el rostro de Lucas y con la leyenda "Justicia" y en medio de un profundo dolor, Cintia López y Mario "Peka" González agradecieron la compañía "de los vecinos, de los amigos, de los compañeros del fútbol, de los distintos clubes", para luego aclarar que lo que quieren "no es venganza".
Desde antes de las 19, cientos de personas se concentraron frente a los tribunales porteños para participar de la manifestación en reclamo de Justicia por el crimen de Lucas.
Al menos cuatro micros llegaron al Obelisco porteño procedentes de Florencio Varela colmados de vecinos y amigos de Lucas que hacían flamear banderas argentinas, mientras se aguardaba el arribo de más de 15 colectivos que salieron desde proximidades de la casa de la víctima con más manifestantes.
Acompañados por varios autos que hacían sonar sus bocinas, dos micros de dos pisos y otros dos de los tradicionales escolares pasaron por el Obelisco, donde también fueron aplaudidos, y continuaron viaje a Talcahuano 550, cuyo frente se hallaba vallado.
Allí, cientos de personas, muchas de ellas jóvenes y familias, ya se concentraban con carteles que reclamaban "Justicia por Lucas" y pedían "Basta de Gatillo Fácil", a la espera de la palabra de los padres del adolescente asesinado sobre el escenario montado frente a la entrada principal de los tribunales.
Algunos conocidos de las víctimas llevaban remeras blancas con la cara de Lucas y una leyenda en el frente que reclamaba Justicia y otra en la espalda que decía "Mi cara, mi ropa y mi barrio, no son delito".
Luego, los manifestantes comenzaron a cantar "Lo sabía, lo sabía, que a Lucas lo mató la policía", lo que fue ovacionado por los asistentes a la marcha, mientras que otros cantaban "Lucas no se murió, Lucas vive en Varela".
También, portaban carteles con la leyenda: "Los policías no combaten los crímenes porque están ocupados en cometerlos".
Pasadas las 19.15 ingresó a la plaza ubicada frente a los tribunales una nutrida columna de personas con bombos y redoblantes y camisetas de Defensa y Justicia, el club de fútbol de Florencio Varela.
El acto finalizó minutos antes de las 20 con un minuto de silencio, mientras los padres de Lucas eran abrazados por los tres adolescentes que sobrevivieron al ataque de los policías.