El brutal ataque ocurrió en la casa de las víctimas en González Catán. Los investigadores sospechan que el doble crimen está vinculado con una venganza.
En una escena de terror, un hombre de 37 años y su hijo de 10 fueron asesinados a balazos tras ser atacados por al menos cinco sicarios en su casa de González Catán, partido de La Matanza. Otros dos familiares resultaron heridos.
El grupo de delincuentes ingresó por la fuerza a la vivienda tras hacerse pasar por policías y huyó del lugar sin robar nada y tras sacarse fotos junto a los cuerpos de las víctimas.
“Maten a todos”, dijo uno de los agresores y luego de ello los homicidas dispararon unos 20 tiros contra la familia que estaba durmiendo en el lugar. Los investigadores sospechan que el doble crimen está vinculado con una venganza.
El brutal ataque ocurrió alrededor de las 2 de la madrugada de este jueves en el inmueble ubicado en las calles Ñorquín y Río Cuarto de la mencionada localidad del sudoeste del conurbano bonaerense.
Todo comenzó cuando una banda de cinco delincuentes armados y encapuchados ingresó por la fuerza tras romper la puerta a patadas de la vivienda, mientras gritaban que eran policías.
A raíz del ataque Jorge Armando del Valle Vázquez, que tenía 37 años y era paraguayo, recibió al menos dos balazos en la cabeza que le causaron la muerte en el acto. Esto luego de que uno de los asesinos diera la orden directa: “Mátenlo”.
En tanto que su hijo Isaías, de apenas 10 años y que dormía con el padre, recibió disparos en su cuerpo y también falleció en el lugar a raíz de las heridas sufridas.
Dos mujeres sufrieron heridas por el ataque de sicarios en González Catán
Además Graciela Chamorro, de 29 años y esposa y madre de las víctimas respectivamente, recibió un balazo en la pierna y la axila izquierda. Mientras que su hermana Ricarda Liz Chamorro, de 19, resultó herida en el hombro izquierdo.
Las mujeres, también oriundas de Paraguay, fueron trasladadas de urgencia a un centro de salud cercano y luego fueron derivadas al Hospital Paroissien de Isidro Casanova, donde quedaron internadas en terapia intensiva.
Según las fuentes consultadas otro cuñado, de 30 años, y la abuela del nene, de 53, que estaban durmiendo en otras habitaciones, resultaron ilesos tras escapar por la parte trasera del inmueble.
La Policía confirmó que la banda criminal se llevó el DVR de las seis cámaras de seguridad que habían colocado los propietarios de la casa, una de las cuales fue encontrada luego por los agentes tirada en la calle.