El laboratorio pedirá, junto a su socio BioNTech, autorización a las agencias regulatorias de Estados Unidos y Europa. Considera que de esa manera se incrementará el nivel de anticuerpos contra la cepa Delta y otras de menor contagiosidad.
Los laboratorios Pfizer y BioNTech anunciaron este jueves que buscarán la autorización de las agencias regulatorias de Estados Unidos y Europa para aplicar una tercera dosis de su vacuna contra el coronavirus.
”Las empresas esperan publicar datos más definitivos pronto, así como en una revista revisada por pares, y planean enviar los datos a la FDA (Agencia estadounidense de Alimentos y Drogas], a la EMA (Agencia Europea de Medicamentos] y otras autoridades reguladoras en las próximas semanas”, indicó un comunicado divulgado en Washington y citado por la AFP.
El anuncio fue hecho después que se conocieran los datos de una prueba llevan a cabo actualmente ambos laboratorios sobre la eficacia de una eventual tercera dosis de la vacuna contra el COVID-19.
El estudio reveló que, en efecto, una tercera dosis incrementa los niveles de anticuerpos de cinco a diez veces más contra la cepa original del coronavirus y la variante Beta, hallada por primera vez en Sudáfrica, en comparación con las dos primeras dosis.
Las dos empresas consideran que una tercera dosis actuaría de manera similar contra la variante Delta, altamente contagiosa y originaria de la India.
“Si bien la protección contra la enfermedad grave se mantuvo alta durante los seis meses completos, la disminución observada en la eficacia contra el COVID-19 asintomático a lo largo del tiempo y la aparición continua de variantes son factores clave que impulsan nuestra creencia de que probablemente será necesaria una tercera dosis de refuerzo para mantener los niveles más altos de protección”, añadió el comunicado.
Por mayor precaución, las empresas también están desarrollando una vacuna específica para Delta. Las primeras muestras están siendo fabricadas en las instalaciones de BioNTech en Mainz, Alemania.
Ambos laboratorios estiman que los estudios clínicos empezarán en agosto, sujeto a la aprobación de los agentes reguladores.
Qué puede suceder con la vacuna Pfizer en Argentina
Las vacunas de Pfizer han sido más que una piedra en el zapato en el plan de vacunación del Gobierno. A pesar de tener la posibilidad de adquirir 13 millones de dosis el año pasado, la administración de Alberto Fernández nunca llegó a un acuerdo con el laboratorio estadounidense tras aprobar una Ley de Vacunas en uno de cuyos items incluyó la palabra “negligencia” en torno a hipotéticos reclamos de eventuales damnificados.
Hoy, esa vacuna es la única que se aplica a menores de 18 años en la región.
La semana pasada, el gobierno nacional firmó un DNU que modificó la Ley de Vacunas, quitando la palabra negligencia para otorgarle un marco legal adecuado al posible acuerdo con Pfizer, Moderna y Johnson & Johnson.
El Gobierno anunció este jueves que firmará el lunes con el laboratorio Moderna la compra de sus vacunas contra el coronavirus. Se trata de un suero norteamericano que podría aplicarse en personas menores de edad.