Ahmad Fazil advirtió en TN que no puede escapar del país, que volvió a ser dominado por extremistas islámicos después de 20 años.
Miles de personas fueron en masa al aeropuerto de Kabul para tratar de escapar de los talibanes, que volvieron a tomar el poder en Afganistán después de 20 años. Desesperados, los ciudadanos se colgaron de los aviones para intentar huir de los extremistas islámicos. Pero esa no es una opción para el profesor universitario Ahmad Fazil, que advirtió en declaraciones a TN que si trata de escapar cree que lo van a matar. Igualmente reconoció: “Dentro de unos días no sé si voy a estar vivo”.
El académico habla con miedo. Explicó que se enteró del avance de los talibanes a la capital del país mientras estaba en la universidad, que tuvo que abandonar por su seguridad. Fue a su casa, inicialmente no encontró a sus hermanos y admitió que sintió “mucho miedo”. Mencionó que sus familiares luego llegaron a las corridas a la vivienda. Desde ese momento permanecen encerrados, ya que creen que es la mejor manera de protegerse. En la noche del domingo uno de sus compañeros lo llamó y le avisó que Kabul había vuelto a caer en manos de los talibanes.
Consideró que no tiene “ninguna opción para escapar”, y se pregunta: “¿A dónde puedo ir, a dónde puedo escapar? Si lo intento creo que voy a morir, por eso es mejor que esté encerrado en casa. Es la mejor opción que tengo en este momento”. Explicó que las fronteras están cerradas y que durante los próximos días los únicos vuelos que habrá hacer son los militares.
Aclaró que “se puede salir de casa”, aunque agregó: “¿Quién se atreve a hacerlo?”. Advirtió que además de los talibanes hay “mucha gente aprovechadora, que mata a otras personas y roba negocios, por lo que en la calle puede pasar cualquier cosa”.
La toma del poder en Afganistán, donde los talibanes entraron a la capital sin encontrar resistencia, presagia profundos cambios políticos y sociales no sólo en el país sino también en los estados vecinos.
Pese a que el vocero de los extremistas islámicos Suhail Shaheen dijo en declaraciones a BBC que van a formar un “gobierno islámico inclusivo” con otras facciones y que mantienen negociaciones con políticos de alto nivel, incluidos líderes del gobierno anterior.
Aunque persisten en la idea de hacer cumplir la ley islámica dicen que proporcionarán “un entorno seguro para el regreso a la vida normal después de décadas de guerra”.
Sin embargo muchos afganos desconfían de estas promesas de los talibanes y temen que el futuro gobierno sea tan violento y opresivo como el anterior. Advirtieron sobre preocupantes señales como el intento de regresar el nombre del país a Emirato Islámico de Afganistán, que es como lo llamaron la última vez que estuvieron en el poder.