Una directora de área de la Organización Mundial de la Salud advirtió que la epidemia de coronavirus, si bien tiene múltiples focos, aún no se ha extendido por todo el mundo.
GINEBRA/ PEKÍN.- La Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzó medidas para contrarrestar la difusión de rumores y desinformación acerca del coronavirus y consideró que todavía no es una pandemia. Mientras tanto, el Gobierno de China instó a los demás países a valorar la epidemia de forma racional, con respuestas basadas en la ciencia.
“La difusión de rumores e informaciones inexactas es un fenómeno real con el que hay que lidiar desde el principio”, observó la directora del área de preparación para urgencias infecciosas de la OMS, Sylvie Briand. Los casos en todo el mundo ascienden a 20.630 confirmados. La mayoría de estos contagios ocurrió en China, donde ha habido 20.471 infecciones confirmadas y al menos 425 personas muertas.
También hubo una víctima mortal en Filipinas y otra en Hong Kong. En el resto del mundo 23 países reportaron casos, aunque todavía no hay contagios confirmados ni en África ni en América Latina. Por esta razón la OMS considera que no se puede hablar aún de una pandemia, término que se utiliza cuando una nueva enfermedad se propaga por todo el mundo.
“Es una epidemia con múltiples focos e intentaremos frenar la transmisión en cada uno de esos focos”, precisó Briand. Explicó, además, que cuando hay cuestiones que todavía se desconocen, como sucede en el caso del nuevo coronavirus, la gente intenta llenar esos vacíos con diferentes tipos de información. También subrayó que es una información inexacta indicar que el virus podría ser transmitido por personas sin síntomas. “Crea la impresión de que el virus se encuentra en el aire”, alertó.
EN ARGELIA. Un hotel fue afectado para evacuar a ciudadanos trasladados.
Para contrarrestar esta ola de desinformación, el equipo de la OMS intenta ofrecer mensajes adaptados a las audiencias de los distintos sectores de la economía. Expuso los mensajes correctos que deben hacer circular entre sus empleados y los consejos que deben transmitirles para proteger la salud. En el caso del transporte aéreo, que reaccionó severamente ante el coronavirus -varias compañías internacionales cancelaron sus viajes a China-, la directora dijo que la OMS definirá con las aerolíneas recomendaciones específicas para que su personal se sienta protegido y puedan reanudar los vuelos a China.
Entre el SARS y la gripe
Briand ubicó al coronavirus como una enfermedad entre el SARS (síndrome respiratorio agudo grave, por su siglas en inglés) y la gripe, sobre todo porque se transmite a través de pequeñas gotas que el infectado expectora cuando tose o escupe. Aunque se sabe que ellas pueden contaminar una superficie, se ignora cuánto tiempo el virus puede mantenerse activo.
En una rueda de prensa, la especialista sostuvo que la OMS no tiene pruebas de que el virus esté mutando y sí de que es bastante estable. También advirtió que circuló información errónea sobre el posible uso de antirretrovirales para el VIH (virus de la inmunodeficiencia humana) o de tratamientos contra el ébola para curar el coronavirus.
Con respecto a las medidas que tomaron varios países para contrarrestar el brote del coronavirus, la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Hua Chunying, criticó a Washington por haber reaccionado de manera inapropiada y en contra de los consejos de la OMS. En los últimos días, el director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, había señalado que no hay ninguna razón para tomar medidas innecesarias que restrinjan los viajes y el comercio internacional. Ahora Hua señaló que el Gobierno de Estados Unidos no brindó ninguna ayuda sustancial, pero fue el primero en evacuar a su personal consular de Wuhan, el primero en sugerir la retirada parcial de sus funcionarios de Embajada y el primero en imponer una prohibición integral a los viajeros chinos.
En tanto, el crucero ‘Diamond Princess’, con 3.711 personas a bordo, ha sido puesto este martes de nuevo en cuarentena en el puerto japonés de Yokohama, al sur de Tokio, ante posibles casos del nuevo coronavirus chino después de que uno de los pasajeros que desembarcó en Hong Kong el pasado 25 de enero diera positivo.
Al menos ocho personas a bordo del crucero padecen fiebre, según ha informado el portavoz del Gobierno Yoshihide Suga, que ha señalado que todos los pasajeros serán sometidos a análisis médicos para descartar que se hayan visto afectados. (Télam-Europa Press)
Una posible cura: prueban remedios para frenar la enfermedad
En el Hospital de la Amistad China-Japón de Pekín empezarán los ensayos clínicos con un medicamento experimental llamado Remdesivir a 270 pacientes infectados de coronavirus. Fue desarrollado por la compañía estadounidense de biotecnología Gilead Sciences. Se administró esta semana a un hombre de 35 años que dio positivo por el virus y cuyos síntomas parecieron mejorar en un día sin efectos secundarios obvios.
El remdesivir ha sido utilizado para tratar infecciones de Ébola en otros países. Aunque el medicamento no ha pasado por todos los procedimientos de ensayos clínicos en el 2019-nCoV en el extranjero, ha mostrado una actividad in vitro bastante buena en investigaciones nacionales relacionadas, asegura Sun Yanrong, un funcionario del ministerio. Recientemente, la Administración Nacional de Productos Médicos aprobó al Hospital de Amistad China-Japón y la Academia China de Ciencias Médicas, dos solicitantes para evaluar remdesivir, para realizar ensayos clínicos sobre el medicamento, los cuales se llevarán a cabo hasta el 27 de abril. “Esperamos que se logren buenos resultados en las pruebas”, desea Sun.
Además de remdesivir, los investigadores también seleccionaron varios medicamentos existentes, incluidos el fosfato de cloroquina y el favipiravir, así como algunas medicinas chinas tradicionales que contienen ingredientes antivirales activos como candidatos a fármacos, para más experimentos con animales y ensayos clínicos.
“En la investigación y el desarrollo de medicamentos contra el nuevo coronavirus, la prioridad es mejorar la tasa de curación y reducir la tasa de mortalidad” asegura Sun. (Télam)